Estimados lectores, muchas veces en esta encarnación nos sentimos solos, tanto si lo estamos físicamente como si no.
La soledad es un sentimiento que nos invade frívolamente y que casi escapando de nuestro control mental, nos crea un vacio provisional que normalmente lo percibimos entre nuestro pecho y nuestro estómago, causándonos sensación de frialdad y múltiples consecuencias.
Afortunadamente todo en esta vida es provisional y eterno a la vez, nada es para siempre, pero si eterno; que quiere decir esto?, que todo en la vida son ciclos que empiezan y acaban interponiéndose unos con otros, y justo ahí, en esa interposición, está el vacio, también llamado caos.
Este vacío dura lo que dura el inter ciclo, son momentos de cambios arrítmicos que nos sorprenden soberanamente si no somos conscientes de este funcionamiento, causándonos desconcierto y soledad.
Pero, no estamos ni estaremos nunca solos ya que como mínimo, estaremos con nosotros mismos, cosa en la que no se nos educa en nuestra sociedad occidental, sino al contrario, se nos enseña solo a compartir con los demás, pero no a compartir con nosotros mismos causando la falsa convicción de saber más del prójimo que de uno mismo, como digo siempre, estamos más pendientes del vecino que de lo que ocurre en nuestro ser, precisamente por el miedo que se nos ha inculcado a la soledad, absurdamente.
Se nota ese vacío cuando ha habido una sensación de plenitud en nuestras vidas a cualquier nivel y de golpe y porrazo o bien progresivamente se adviene lo que consideramos una perdida, cuando realmente no lo es, y no lo es porque esa plenitud era solo egocéntrica, si no nunca se perdería, es decir, la plenitud debe consistir en estar a gusto con uno mismo, en ser feliz por sí solo, en encontrarse con tu yo real y eso solo se consigue a través de introspección.
Es por eso que no existe la soledad en si misma si no consideramos al ser como una entidad de una sola dimensión y sin capacidad de intervenir en su propia esencia, perro al ser multidimensional tiene la gran oportunidad de desarrollar sus otros aspectos, así pues podemos sentirnos solos anímicamente aun estando acompañados físicamente e incluso viceversa, esa viceversa es fantástica, puesto que la compañía de alma a alma no necesita del ser físico y además es más sutil.
Siendo así, es muy recomendable el trabajar nuestro interior a través de meditación, creando nuestros propios recursos y descubriendo la gran amplitud de nuestro ser, sin limitaciones dogmáticas, sin ideas preconcebidas y sin prejuicios.
El ser es pleno por concepción, para que vaciarlo?, para nada. Todo es sensación de soledad y vacío a causa del fenómeno del cambio de ciclo y a causa de no aprender a experimentar nuestra propia plenitud.
La soledad ( sol-edad ) es la edad del sol, es el tiempo de percibir en nuestro ser el elemento fuego, es por eso que notamos la sensación de frialdad en el plexo solar situado básicamente en la zona del estómago, es el tiempo de dar calor a ese frio que sentimos, cultivando nuestro Yo cuya entidad ni conoce ni conocerá nunca la soledad porqué es una pieza más cercana a Dios.
Si te sientes solo es porque ha llegado el momento para conocerte mejor, es un aviso de tus otros cuerpos sutiles invitándote a escarbar en ti, recomendándote a contraerte para luego expandirte, ya que en uno de esos cuerpos sutiles, justamente habita nuestro guía cuya misión es asistirnos durante toda nuestra existencia, confirmando aun más que la soledad no existe.
Hablad con vuestro guía en voz alta cada día y en cada momento que lo necesitéis, aunque no lo conozcáis está ahí, empezad por imaginároslo y acabareis por oírle, precisamente gran parte de este escrito ha sido facilitado por mi guía.
En un próximo escrito os hablaré más profundamente de estas divinas entidades, hasta entonces recibid un cordial saludo.
.
Comentarios
Publicar un comentario